6/3/11

De qué hablamos


Talento, concentración y constancia. Cuando vi el título, "De qué hablo cuando hablo de correr", no sólo me llamó la atención lo evidente. Lo evidente es que se trataba de una obra de Haruki Murakami, el novelista al que tanto público sigue en todo el mundo y al que confieso no haber sido muy aficionado. Hasta ahora. Y lo evidente es que invocaba el libro de relatos de Raymond Carver "De qué hablamos cuando hablamos de amor". En efecto, es un homenaje que Murakami tributa al desaparecido autor estadounidense, maestro del realismo sucio, a quien ha traducido al japonés. Pero había una tercera cosa, menos común, que me atrajo de ese título autobiográfico. Habla de correr. Me gusta, he corrido y he trotado sin talento durante muchos años, con cierta concentración y cierta constancia ya perdidas. Volveré a ello. Hojeando "De qué hablo cuando hablo de correr" (editado por Tusquets) destacan afirmaciones como ésta: "...la mayoría de lo que sé sobre la escritura lo he ido aprendiendo corriendo por la calle cada mañana". Y leyéndolo se acaba conociendo por qué: las cualidades para escribir, para correr (¿para amar?), serían las mismas, a saber, talento, concentración y constancia. Y sólo las dos últimas se pueden entrenar. Es discutible, como discutible es que Murakami, novelista y maratoniano, atribuya el talento a la juventud, y la concentración y la constancia a la experiencia. Es discutible y un punto desmotivador, aunque intente consolar a quienes peinamos canas: "...esa progresiva pérdida natural de talento se puede ir supliendo a base de madurez personal". Volveré a ello más adelante, no hoy. ¿Que de qué hablo? Por supuesto, de correr.

4 comentarios:

  1. Murakami me encanta.Pero no estoy de acuerdo en esto. El Talento puede educarse

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  2. Pienso al correr que lo que corre más deprisa es la vida, me ha dado pena leer que estés peinando canas, hay quien no lo puede hacer.

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  3. Eso eso, mucha madurez personal (?) para suplir el talento que se pierde (?)... y, como decía Grocho Marx: "Y dos huevos duros".
    Un abrazo grande puretilla.

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  4. A mí me ha recordado a otro título interesante de Berne: ¿Qué hace usted con el amor cuando hace el amor?
    Un abrazo

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